En el pasado Acción Popular fue un partido importante para el país, siempre bajo la figura del dos veces presidente Fernando Belaunde Terry, quien cometió graves errores que no se pueden obviar. Sin duda le faltó carácter, no vio venir el crecimiento del terrorismo criminal y en materia económica fue un desastre en sus dos mandatos, pero jamás fue ladrón ni sinvergüenza. Al contrario. Algunos afirman que en 1985 salió de Palacio de Gobierno con menos dinero y patrimonio del que tenía en 1980. Por eso, llama la atención que salvo excepciones, lo que queda de su partido se haya convertido en un semillero de pillos y sinvergüenzas como esos oscuros congresistas conocidos con el alias de “Los niños”. ¿Qué ha pasado con “la lampa” para que esta gente haya podido infiltrar este partido? ¿Quiénes son los responsables de que estos sujetos hayan llegado a ensuciar más la gestión pública? El problema es que hoy Acción Popular no tiene ni dirigencia conocida. En verdad, todo es un desastre, lo que afecta a los peruanos. Para llorar.